Infidelidad. 

diluenta de las veces que labia marcado al número de teléfono de Sarah, no perdía la esperanza de que contestara aunque 

Juna de mis llamadas o uno de los tantos mensajes que le envie desde que llegó ese documento, aunque sé que me habia bloqueado 

despues de encontrarme de aquella manera con Rachel en mi oficina. 

Recucido la decepción, el repudio y desprecio en sus ojos, no cia para menos, la había lastimado de la peor manera, odiaba tener 

que admitirlo, pero le hice pedazos su noble corazón que no hacia más que latir por mi. 

“Te hare llegar el acta de divorcio.” 

Cuando dijo aquello crei que habia sido un arrebato de su parte, crei que la rabia hablaba por ella, cuando la vi en la oficina 

consideré la idea de contarle aquel secreto con el que Rachel me chantajeaba desde hace meses, le iba a pedir perdón por haberla 

dctraudado de esa manera, iba a acabar con aquello al llegar a la casa, pero jamás la crei capaz de pedirme el divorcio, hasta este 

momento que tenia el documento en mi mano, leyendo por enésima vez linea por linea, buscando alguna cláusula donde solicitara 

indemnización por infidelidad, por los dos anos de matrimonio o tal vez reclamar la mitad de los bienes que le correspondia, en cambio, 

me llevé la sorpresa de que no queria ni un centavo, ella solo queria divorciarse de misi. mas. 

Me sentia cada vez mas intado por la mierda que le hice a la persona que menos lo merecia. 

En un ataque de frustración, estrelle el vaso de whisky contra la pared volviendolo anicos, en el preciso instante que mi secretaria aparecia por la puerta con la mirada asustada. 

– Dije que no me molestara, ¿qué parte no ha entendido? – pregunté sin una pizca de amiabilidad, no podia serlo cuando por dentro me estaba consumiendo en las llamas del arrepentimiento, la culpa y la desesperacion por no poder encontrar a Sarah. 

Necesitaba que escuchara mis razones, no importa si después de eso quiere seguir con el divorcio, pero al menos le habré explicado todo, aunque enganarla con su mejor amiga, no tenia perdón ni justificación alguna. 

– Lo siento, señor. Es que la señora Amelia está aqui. comenzó explicando una temerosa Cristina, mientras miraba el vaso hecho 

pedazos en el suelo. 

– La señora Amelia es la última persona que quiero ver. -dije renuente a la idea de volver a hablar con mi madre, después de la 

manera en la que se habia relendo a mi esposa. 

“Esa niñita solo arruinaba tu imagen, nadie sabe sobre su origen. pero se nota que es una pobre, no esta a tu nivel, mereces algo 

mejor.” 

“De seguro encontro un mejor partido. “888 

“Es una caza fortunas.” 

No estaba ni cerca, Sarah era todo lo contrario a como mi madre la pintaba. 

-¿Ese es el trato que se merece la persona que le dio la vida?-y ahi entro ella, queriendo colmar mi poca paciencia y lo que me 

quedaba de tranquilidad. 

Te di una mirada severa a mi secretaria por desobedecer mi orden de no recibir ninguna visita, me labia desobedecido al dejar pasar 

a mi madre y ella lo sabia, agachó su cabeza en un intento de disculpas y tuve que dar media vuelta para caminar hasta el ventanal. 

dándole la espalda al par de mujeres que estaban en mi oficina, de lo contrario, terminaria desquitando mi mal humor con Cuistipa vella 

no tenia la culpa de lo que yo provoqué. 

— Espero que no estés así por la ausencia de la mojigata de Sarah. -cerre mis ojos mientras tomaba una bocanada de aire, queria 

mantenerme sereno, pero los constantes ataques de mi madre hacia Sarah no ayudaban del todo. 

Sarah de esa manera. -dije con la voz lan gelida, sin dedicarle una

habia sentado en la

exagerada suma de dinero para divorciarse de ti,

de gracia, la vi dándole un vistazo al

solo centavo, renuncio a la parte que le corresponde

cuello y por un momento pense que con aquello quedaba demostrado que ella no era la interesada o

siguió con los ataques ami…

que no le correspondenoun dolar de la famulangster, pero claro, Scruramente ahorano le

a la vista-apové mis

formaron una munecay pude n’r un brillo de malicia en sus ojos.

ella scosu celular, luego

vicepresidente de la prestigiosa (su de

venia acompañada de un par de imatenes, en una estrechaba su

reconocida empre 

  1. Hombre que 

y que mimalhumor dumonlard considerablemente, era ella, abrazada con el castaño del cual habia leido unas cuantas noticias, tento entendido que socio de Domnet. su nombre es Paul Dubois, la mayoria de las notas que aparecian de el. estaba involucrado en pundalosch lads, un mujergo sin remedio y esta no era la

puesto los ojos en el soltero mas

con la

de la empresa en la que esta JSOCdo? Se aprout is segunda boda de

lo que estaba leyendo y solté un

reemplazado lan pronto 

era su

recibido. 

devolvi el celular em made, ella lo recibo con

de la cosa

No ha pasado ni una semana desde que has douxpulsada de la familia Lancaster y ya se ha encontrado

tanto desde luace mucho tiempo,

verdadero motivo de nuestradivorcio. Salah no lenia ojos pard

mi, lo

esposa y

lo visita, tengo cosas por hacer, dije ignorando

omi mayor

casillas al frente de

intento abrirte los ojos,

contigo. Servanto des

n ovno 

de evitar 

una mirada

a relerurte de esa manera de mi esposa, bastu

esperesentando 

il 

y munadie

sorna. 

Hijo, solo ma esos papeles de una vez por todas,

lees lavonalalamun 

110 quemas

gran Sarah Pelit. solto con alles

de mi

parte. 

dijera que quien habia sido intellunyo y que por eso me habla envido los

arto de 

que quien fallo lui yo.

esluviera relacionada con Sarah, necesitaba saber en donde

realtiala nota que me

mi corazon de enopo al masinlagentes de ellos en lo

lina cumon exlusiva. 

Dan I, curia una dante onu minteas abrazba a l’aul.in.js Hipes de ambos DaLen

Fuentrs/os informoni, quell 

seuacion de

nd 

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